FALACIA NATURALISTA
Creencia de que todo lo natural es mejor. Como si la naturaleza estuviera dedicada a complacer y ajustarse a los seres humanos. Las personas que cometen esta falacia argumentan que algo es bueno por el simple hecho de ser natural. Normalmente desconocen que casi todo lo que toman actualmente y creen que es natural, en realidad no lo es. Por ejemplo, la mayoría de frutas que tomamos no existen de forma salvaje, sino que han sido cultivadas y seleccionadas artificialmente. Gracias a este sesgo la palabra "natural" se ha convertido en una fuerte estrategia de marketing.
FALACIA ANTIQUITATEM
Apelar a que todo tiempo pasado fue mejor, a creer que toda generación pasada fue más feliz que la nuestra, a que todo lo que sea antiguo y tradicional es mejor. Parece que las personas sumidas en esta falacia creen que los antepasados tenían un conocimiento más profundo, especialmente en medicina. Y eso es un grave error. Las personas que cometen esta falacia suelen usar frases del tipo "esto lo hacían nuestros ancestros", como si la mera pronunciación de dicha frase diera validez a sus afirmaciones. El conocimiento es acumulativo, y hemos conseguido suplir muchos errores que nuestros antepasados cometían. Entonces, ¿por qué hacían las cosas de forma diferente? Simplemente, porque no sabían qué hacer, cómo hacerlo, ni tenían alternativas o herramientas para avanzar en su conocimiento.
En ambas falacias, china y oriente son dos conceptos que tienen suficiente fuerza para persuadir a las personas que están sumidas en esta falacia. Algunas personas olvidan que china tiene muy buenos avances médicos, y todos ellos se deben al método científico. Allí la "medicina tradicional china" se practica como una mera superstición por gente de a pie, no es parte del sistema sanitario ni es el remedio que utilicen los chinos de primera mano (de hecho, probablemente le damos más importancia en nuestro país a esa "medicina alternativa" que la que le dan ellos mismos).
Tiene cierta gracia cómo a medida que retrocedemos en el tiempo, más se parece el estilo de vida de nuestros antepasados al modelo de vida que desean llevar los "naturalistas", y sin embargo, ignoran el hecho de que nuestra esperanza de vida va en aumento.
¿Puede ser que a la base de todo esto, exista cierta neofobia? Un estilo de vida conservador, miedo hacia la incertidumbre, recelo a probar cosas nuevas... A la hora de probar algo nuevo, preferimos pensar que se lleva haciendo mucho tiempo, y no sentir la incertidumbre de ser los primeros en experimentar nuevas cosas.
Fuente: Ciencioides
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